Las consultas transculturales reciben cada vez más mujeres que huyen de las múltiples violencias de las que son víctimas en sus países : ellas son sometidas particularmente a violencias sexuales repetidas dentro de sus familias, o como represalias de parte de agentes dictatoriales del Estado. El abordaje psicoterapéutico les permite volver a tomar la palabra y de esta manera iniciar el proceso de reconstrucción. Sin embargo, estas violencias no son bien reconocidas por la convención de Ginebra. El concepto de Françoise Héritier: « la valencia diferencial de los sexos » permite comprender cómo las violencias sobre las mujeres representan una cuestión profundamente política. El concepto de « obstáculo al pensamiento » permite desencadenar la reflexión sobre cómo esta diferencia hombre/mujer es exhibida y utilizada. A pesar de las luchas feministas que han permitido una mejoría en la protección internacional que debería ser universal, no deja de ser cierto que las inequidades siguen existiendo en lo que concierne la ccomprensión de la injusticia contra la mujer en las violencias sexuales ; la incomprensión perdura delante de la lucha contra la opresión que representa el acte de migrar.